"Libros"

Título: Manifiesto Maggot

Autor: Cesar Giulietti

Género: Poesía

Formato: 11cm x 17cm / encuadernado/ 60pag con imágenes

Maggot, el manifiesto.


Somos la ambigüedad
¿Qué duda hay?

Somos el desorden de la obra

Nuestras imágenes significan
Chorros de irracionalidad

Somos los iniciados
De la diáspora.

Una operación en las percepciones
Que de sentido
…pero al descalabro.

Lo que sigue no establece
relaciones con el “consumo masivo”

Este vientre calórico arropa
a unos pocos
Que hacen del deleite esa exclusiva
Mordedura de tiburón...

“hay quien nace póstumo”

Nuestra meta es tan efímera
como la absoluta imposibilidad
del enfoque.

Nuestro concepto de arte o de creación
Es un llamado a destruir todo
Concepto de arte o de creación.

No hay necesidad alguna de ir
Hacia el mundo a captar algo
Porque sencillamente
No hay mundo
“aun no estamos en él...”

Somos un infarto alrededor
del hombre descuidado.
La lengua engatusa.


Nuestro camino es
Desocuparnos del camino

Adoptamos formas atroces de huidas
Precisamente para llegar
A ningún lado...

Que sornas decoran mi rostro
Hablo para no decir nada
Mi realidad es la ilusión.

Human maggot...


¡OH humano!

Que dejas tras de ti, sombras lagunosas...
Tu rostro irritado... Tu paso de necio ensortijado...
(Tu orcaza superflua, de banal ballena)
Tu lana de ovillo... te plaga tu naso
Tu tos senil, latosa como el perfume griego

OH! Humano de temperatura media
Una voz de escollo hueco
Como la seca hoz de un arpón grosero
A ti me acerco... es hora de brindar...
Gorgojo Humano!

Se acercan, tus horas del Glamour...

OH! Cuando pienso en esa grulla implacable
En ese penacho guerrero
El cuerno lanzado al abismo
La bruma fatiga
La tersa cuchilla de la guillotina

¡OH Bibliotecas!!!
Majestades siniestras...

Como terca plaga... poseída...
Bateo mis labios de tergopor...
Mi nave se aleja de los
Sabios ladrones del verano
Mi saco se detiene ante la mano
Que lo alza y los arcos del triunfo reviran
Aquellas pequeñas voces del tumulto ajeno
Espaldas corvas sostienen
Aguerridos maestres
Sobre el aire horizontal, a una infinidad de
Círculos pintados con nervios de pájaros...
¡Qué reverencia! ¡Qué saludo majestuoso!

La mesa está servida, como terca plaga...
Poseída... bateo mis labios de tergopor...
Naranjada para todos...
Sois el invitado humano tetrainútil...

La lamentable voz que queda de todos esos
Diálogos estúpidos y sin sentido,
Tiene razón, pero la tiene bien guardada;
Desde entonces... ¡qué me importa!

¡Mequetrefes!!!

OH! humano
Camino hacia el error

La brisa vasta de esa pérgola
Retira su sonrisa
Los abrazos se desarman sobre la misma
Desaparición de lo que fue una palabra...

Me sirven la sopa caliente
Sombras que no describo
Me hablan idiomas que no traduzco
...aun se siguen usando
Los índices para condenar
Me valgo de la digna ateosofía...

“Hay que dejar de sostener
Con la palabra.
Hay que dejar que ella
Se aliviane hasta que su brillo,
Opacándose eclipse...
Hay que vaciar toda argumentación,
Que la comunicación estalle.
Que el gesto y la señal se interrumpan;
Que el rostro pierda su poder de enfoque,
Los ojos enterrados sobre el profundo negro;
De alguna manera la vida debe
Retornar a los templos y decapitar lo santo...
Hay que incendiar... lo estéril del humano
De ayer, al mismo tiempo que
Descalabra toda la escuela
Del teatro actual”

Me sirven la sopa caliente
Sombras que no describo
Me hablan idiomas que no traduzco

La nueva creación significa...
Que nadie signifique...
La consumación de una enervante
Y brutal huída de todo lo que existe...

OH! Humano de temperatura media
Se acercan tus horas...
Tu voz... se pierde...
Tiempo de expirar...
¡Gorgojo Humano!